Los riesgos laborales son aquellos peligros o situaciones potencialmente dañinas que pueden surgir en el entorno de trabajo y afectar la salud y la seguridad de los trabajadores.
Estos riesgos pueden ser de diferentes tipos, como los riesgos físicos, que incluyen la exposición a sustancias químicas, ruido o temperaturas extremas; los riesgos ergonómicos, relacionados con la adaptación de los puestos de trabajo a las capacidades y características de los trabajadores; los riesgos psicosociales, que se refieren a factores como el estrés laboral, el acoso o el clima laboral negativo; y los riesgos biológicos, asociados a la exposición a microorganismos o agentes patógenos.
La gestión adecuada de los riesgos laborales es fundamental para proteger la salud y seguridad de los trabajadores, así como para prevenir accidentes y enfermedades profesionales. Esto implica identificar y evaluar los riesgos presentes en el entorno laboral, implementar medidas preventivas para controlarlos y promover una cultura de seguridad en la empresa.
Los riesgos físicos son aquellos que pueden causar daño directo al cuerpo humano debido a la exposición a condiciones o elementos peligrosos en el entorno de trabajo. Algunos de estos riesgos incluyen el ruido, las vibraciones, la iluminación intensa, la temperatura y las tareas con riesgo físico.
El ruido excesivo en el lugar de trabajo puede tener efectos negativos en la salud auditiva de los trabajadores. La exposición prolongada a niveles altos de ruido puede provocar pérdida de audición y otros problemas relacionados.
Las vibraciones, especialmente aquellas generadas por herramientas o maquinaria, también pueden ser dañinas para los trabajadores. Las vibraciones constantes pueden causar lesiones musculoesqueléticas, como trastornos de las articulaciones y dolores crónicos.
La iluminación intensa o inadecuada puede afectar negativamente la salud visual de los trabajadores. La falta de iluminación adecuada puede causar fatiga ocular, dolores de cabeza y dificultad para realizar tareas visuales con precisión.
La exposición a temperaturas extremas, ya sea frío o calor, puede ser peligrosa para los trabajadores. El frío extremo puede causar hipotermia y congelación, mientras que el calor excesivo puede provocar agotamiento por calor y golpe de calor.
Los riesgos biológicos abarcan la exposición a agentes patógenos como bacterias, virus, parásitos y hongos, los cuales pueden causar enfermedades infecciosas en los trabajadores expuestos. La manera adecuada de abordar estos riesgos incluye implementar medidas de bioseguridad, como el uso de equipos de protección personal, como guantes, mascarillas y batas, para evitar el contacto directo con organismos y fluidos biológicos.
Los tipos de agentes patógenos varían y pueden incluir virus como el VIH, hepatitis B y C, influenza, entre otros; bacterias como la tuberculosis, salmonelosis y meningitis; parásitos como la malaria y la toxoplasmosis; y hongos como la candidiasis y la aspergilosis. En cuanto a las enfermedades que pueden causar, estas también son diversas y van desde enfermedades respiratorias, gastrointestinales, dermatológicas hasta enfermedades de transmisión sexual.
Para proteger a los trabajadores de estos riesgos biológicos, es importante implementar programas de control de salud que incluyan pruebas médicas específicas, como análisis de sangre para detectar la presencia de virus o bacterias, y vacunaciones contra enfermedades infecciosas. De esta manera, se puede prevenir la propagación de enfermedades y garantizar la salud y seguridad de los trabajadores sanitarios.
Los riesgos mecánicos son situaciones en un entorno laboral que pueden causar lesiones o daños a los trabajadores debido a la exposición a condiciones inseguras. Algunos ejemplos de riesgos mecánicos incluyen trabajos en altura sin protección adecuada, herramientas o maquinaria en estado deficiente o mal uso de los equipos de trabajo.
Para prevenir estos riesgos, es fundamental llevar a cabo revisiones periódicas de los materiales y cumplir estrictamente con las medidas de seguridad establecidas. La realización de revisiones periódicas permite identificar posibles fallos o desgastes en maquinarias o herramientas, y así poder repararlos o reemplazarlos a tiempo. Además, el cumplimiento de las medidas de seguridad, como el uso de protección personal apropiada, sistemas de sujeción en trabajos en altura y el correcto uso de herramientas o maquinarias, ayuda a evitar accidentes.
Los Riesgos Psicosociales se refieren a los factores del ambiente laboral que pueden afectar la salud mental de los trabajadores. Es importante abordar estos riesgos para promover un ambiente laboral seguro y saludable.
Para prevenir los Riesgos Psicosociales, es fundamental fomentar un ambiente laboral positivo y seguro. Esto implica establecer buenas relaciones entre los colaboradores, brindar apoyo emocional y promover la comunicación efectiva. También se deben establecer y promover políticas claras contra el acoso y el acoso moral, para crear un ambiente libre de hostigamiento.
Proporcionar recursos para manejar el estrés es otra medida preventiva importante. Esto puede incluir programas de capacitación para la gestión del estrés, la promoción de actividades físicas o la impartición de talleres sobre técnicas de relajación. Además, fomentar una cultura de la salud y el bienestar a través de programas de bienestar en el trabajo puede ayudar a reducir los riesgos psicosociales.
Los riesgos químicos son aquellos peligros ocasionados por procesos químicos y medioambientales que pueden amenazar la salud y la seguridad de las personas. Existen diversos riesgos químicos, como alergias y reacciones producidas por inhalaciones.
Las alergias químicas son respuestas exageradas del sistema inmune a sustancias químicas específicas. Estas sustancias, conocidas como alérgenos, pueden encontrarse en productos de limpieza, materiales de construcción o pesticidas, entre otros. Cuando una persona alérgica entra en contacto con un alérgeno, puede experimentar síntomas como erupciones cutáneas, dificultades respiratorias o malestar general.
Las inhalaciones de sustancias químicas también representan un riesgo importante. La exposición a vapores o gases químicos puede provocar irritación en las vías respiratorias, intoxicación e incluso daños permanentes a los pulmones. Además, dependiendo de la sustancia inhalada, también existe el riesgo de incendios o explosiones.
Para prevenir estos riesgos y proteger a las personas, es esencial implementar medidas de seguridad adecuadas. El uso de sistemas de protección personal, como guantes, gafas de seguridad y mascarillas, ayuda a minimizar el contacto con sustancias químicas peligrosas. Asimismo, es fundamental contar con una ventilación adecuada en los espacios de trabajo para evitar la acumulación de vapores y gases tóxicos.
Los riesgos ergonómicos son aquellos peligros relacionados con las condiciones de trabajo que pueden afectar la salud y el bienestar de los empleados. En el ámbito laboral, pueden surgir diferentes riesgos ergonómicos debido a posturas y posiciones inadecuadas, la repetición excesiva de movimientos y el levantamiento de objetos pesados.
Uno de los principales riesgos ergonómicos está relacionado con las malas posturas y posiciones, como estar sentado durante largos períodos de tiempo en una silla que no proporciona un buen soporte para la espalda. Esto puede generar dolor de espalda, cuello y hombros, así como problemas de circulación y fatiga muscular.
El levantamiento de objetos pesados sin la técnica adecuada también puede suponer un riesgo ergonómico. Esto puede ocasionar lesiones en la espalda, como hernias discales y problemas en los músculos y las articulaciones.
Además, el trabajo prolongado con monitores y pantallas puede afectar negativamente la vista. La exposición constante a la luz emitida por los monitores puede ocasionar fatiga ocular, sequedad y visión borrosa.
La reglamentación y normatividad colombiana para la clasificación de riesgos en función de las actividades económicas y las clases de riesgo existentes se establece a través del Decreto 1072 de 2015, en su capítulo 6, titulado "Clasificación de las Empresas según el Riesgo".
Este decreto establece que todas las empresas en Colombia deben ser clasificadas en una de las cinco clases de riesgo existentes, que van desde la clase de riesgo mínimo (clase 1) hasta la clase de riesgo máximo (clase 5). La clasificación se realiza teniendo en cuenta las actividades económicas que realiza la empresa y los riesgos asociados a estas actividades.
En cuanto a las obligaciones del empleador, este decreto establece que deben realizar de manera obligatoria la cotización al Sistema General de Riesgos Laborales (SGRL), que es un sistema de seguridad social que protege a los trabajadores frente a los accidentes y enfermedades laborales. La cotización se calcula en función de la clasificación de riesgo de la empresa y se realiza mensualmente.
En caso de incumplimiento de las obligaciones de cotización, el empleador puede ser sancionado con multas y recargos. Las sanciones varían dependiendo del tipo de incumplimiento y pueden llegar a ser muy elevadas.
Es importante mencionar que en el proceso de implementación del Sistema de Gestión de la Seguridad y Salud en el Trabajo (SG-SST), es necesario verificar que la empresa esté cotizando sobre las clases de riesgo correspondientes. Esto asegura que se estén tomando las medidas de prevención y protección adecuadas para garantizar la seguridad y salud de los trabajadores.
En resumen, la reglamentación y normatividad colombiana establece la clasificación de riesgos en función de las actividades económicas y las clases de riesgo existentes, estableciendo las obligaciones de cotización del empleador y las posibles sanciones en caso de incumplimiento. Además, se destaca la importancia de verificar que la empresa esté cotizando sobre las clases de riesgo correspondientes en el proceso de implementación del SG-SST.
Los riesgos laborales ha sido un tema de gran importancia para las organizaciones. Como sabemos, actualmente la ley colombiana exige medidas preventivas y correctivas contra los accidentes de trabajo donde indica que no importa el cargo o posición que se tenga en la empresa, todas las organizaciones deben evaluar el riesgo en el cumplimiento laboral.
Se puede definir el riesgo laboral como la posibilidad de estar expuesto a cualquier tipo de accidentes dentro del espacio de trabajo. Pero estos accidentes pueden llegar a clasificarse por el nivel de riesgo para cada colaborador de la empresa.
Para determinar las clases de riesgo sobre las cuales debe cotizar la empresa, se tiene en cuenta el Decreto 768 de 2022 por el cual se modifica la Tabla de Clasificación de Actividades Económicas para el Sistema General de Riesgos Laborales y se dictan otras disposiciones.
El Ministerio del Trabajo es el encargado de evaluar que la gestión de seguridad y salud en el trabajo sea una realidad al interior de cada organización. Vale la pena aclarar que la implementación de estos programas es obligación de todos los empleadores y que no contar con él puede acarrear sanciones para la empresa.
Evite riesgos y confíe en los servicios, la experiencia y el personal de GPS Talent. Hacemos parte de las empresas de seguridad y salud en el trabajo que entienden la importancia de este sistema y le ayudan a ejecutar un plan acorde con las necesidades particulares de su organización. Contáctenos, estamos para acompañarlo en cada etapa del proceso.